Petrarca eterno
Petrarca, símbolo de amor atemporal
Id, ardientes suspiros, hasta el corazón helado,
para romper el hielo, que el doloroso dardo
de la compasión nunca atraviesa; y si este mortal ruego
es escuchado en el cielo, cuanto menos deseo
que la muerte o la piedad acaben rápido con mi sufrimiento.
Llevaos el dolor, del que he tenido suficiente,
encended la llama que yo no pude prender
y dejadme entonces descansar, a vosotros apelo.
Id, ardientes suspiros, cumplid lo que deseo.
Debo trabajar, ya lo veo, con oficio y con arte,
pues la verdad y la fe en ella se quedaron aparte.
¡Ay! Por eso importunarla no puedo,
con las penosas quejas y el sofocante fuego,
que en mi pecho tuvieron comienzo.
¡Id, ardientes suspiros!
para romper el hielo, que el doloroso dardo
de la compasión nunca atraviesa; y si este mortal ruego
es escuchado en el cielo, cuanto menos deseo
que la muerte o la piedad acaben rápido con mi sufrimiento.
Llevaos el dolor, del que he tenido suficiente,
encended la llama que yo no pude prender
y dejadme entonces descansar, a vosotros apelo.
Id, ardientes suspiros, cumplid lo que deseo.
Debo trabajar, ya lo veo, con oficio y con arte,
pues la verdad y la fe en ella se quedaron aparte.
¡Ay! Por eso importunarla no puedo,
con las penosas quejas y el sofocante fuego,
que en mi pecho tuvieron comienzo.
¡Id, ardientes suspiros!
Go, burning sighs, unto the frozen heart,
To break the ice, which pity’s painful dart
Might never pierce ; and if that mortal prayer
In heaven be heard, at least yet I desire
That death or mercy end my woful smart.
Take with thee pain, whereof I have my part,
And eke the flame from which I cannot start,
And leave me then in rest, I you require.
Go, burning sighs, fulfil that I desire,
I must go work, I see, by craft and art,
For truth and faith in her is laid apart:
Alas, I cannot therefore now assail her,
With pitiful complaint and scalding fire,
That from my breast deceivably doth start.
Go burning sighs!
To break the ice, which pity’s painful dart
Might never pierce ; and if that mortal prayer
In heaven be heard, at least yet I desire
That death or mercy end my woful smart.
Take with thee pain, whereof I have my part,
And eke the flame from which I cannot start,
And leave me then in rest, I you require.
Go, burning sighs, fulfil that I desire,
I must go work, I see, by craft and art,
For truth and faith in her is laid apart:
Alas, I cannot therefore now assail her,
With pitiful complaint and scalding fire,
That from my breast deceivably doth start.
Go burning sighs!
Ternura y amor a la luz de una vela |
Soneto a Laura
Paz no encuentro ni puedo hacer la guerra,
y ardo y soy hielo; y temo y todo aplazo;
y vuelo sobre el cielo y yazgo en tierra;
y nada aprieto y todo el mundo abrazo.
y ardo y soy hielo; y temo y todo aplazo;
y vuelo sobre el cielo y yazgo en tierra;
y nada aprieto y todo el mundo abrazo.
Quien me tiene en prisión, ni abre ni cierra,
ni me retiene ni me suelta el lazo;
y no me mata Amor ni me deshierra,
ni me retiene ni me suelta el lazo;
y no me mata Amor ni me deshierra,
ni me quiere ni quita mi embarazo.
Veo sin ojos y sin lengua grito;
y pido ayuda y parecer anhelo;
y pido ayuda y parecer anhelo;
a otros amo y por mí me siento odiado.
Llorando grito y el dolor transito;
muerte y vida me dan igual desvelo;
por vos estoy, Señora, en este estado.
muerte y vida me dan igual desvelo;
por vos estoy, Señora, en este estado.
Sueños
de Petrarca
Laura de Noves |
Bendecidos
el año, el mes, el día
y la estación y el sitio y el instante
y el hermoso país en que delante
de su mirar mi voluntad rendía.
Y bendecida la tenaz porfía
de amor entre mi pecho palpitante,
y el arco y la saeta y la sangrante
herida que en mi corazón se abría.
Bendecida la voz que repitiendo
va por doquier el nombre de mi amada,
suspiros, ansias, lágrimas vertiendo.
y la estación y el sitio y el instante
y el hermoso país en que delante
de su mirar mi voluntad rendía.
Y bendecida la tenaz porfía
de amor entre mi pecho palpitante,
y el arco y la saeta y la sangrante
herida que en mi corazón se abría.
Bendecida la voz que repitiendo
va por doquier el nombre de mi amada,
suspiros, ansias, lágrimas vertiendo.
Y
bendecido todo cuanto escribe
la mente que al loarla consagrada
en Ella y sólo para Ella vive.
la mente que al loarla consagrada
en Ella y sólo para Ella vive.
En la muerte de Laura
Después de tu comentario Guimera, un vídeo con el que en mi opinión es el poema más triste de Petrarca..., en la muerte de Laura.
Tristeza y desesperación ante la pérdida del ser amado. La música de fondo "'Solveig's Sang'. Barbara Bonney Antonio Pappano Edvard Grieg" acompaña a la tristeza de este soneto.
Su cabellera de oro reluciente,
ResponderEliminarla risa de su angélico semblante
que hizo la tierra al cielo semejante,
¡poco polvo son ya que nada siente!
¡Y sin embargo vivo todavía!
A ciegas, sin la lumbre que amé tanto,
surca mi nave la extensión vacía...
Sus ojos que cante amorosamente,
ResponderEliminarsu cuerpo hermoso que adoré constante,
y que vivir me hiciera tan distante...